¿O deberíamos decir AXL/DC?
Malcolm Young sufre de demencia senil. Phil Rudd está condenado a arresto domiciliario. Brian Johnson se está quedando sordo. Esas fueron las negativas noticias que la popular banda australiana -¿O tendríamos que decir escocesa?- de rock duro generó entre 2014 y 2016. El fin parecía cerca pero no fue así.
Había que continuar la gira del disco de 2014 Rock Or Bust. En un movimiento arriesgado, contrataron como reemplazo de Johnson a Axl Rose. Muchas reacciones se generaron, la mayoría negativas. La expectativa era alta. El resultado: notorio.
Seleccionamos Manchester para este show porque nos quedaba relativamente bien en nuestros planes para darnos una vuelta por Escocia y luego asistir al Download Festival UK 2016. El recinto seleccionado para el evento fue el Etihad Stadium, hogar del Manchester City.
Ese día llegamos con bastante antelación al lugar, así que hicimos lo que la gran mayoría allí hace: beber cerveza. Tuvimos la oportunidad de ver a un tipo haciendo rock con su gaita escocesa, no sabría decir si era The Bad Piper, pero bueno, eso nos entretuvo un rato.
Entramos al bonito estadio cuando aún estaba medio vacío así que nos pudimos situar bien adelante, cerca de la tarima.
Los encargados de calentar al público serían Tyler Bryant and the Shakedown. Han abierto shows para Jeff Beck, BB King, Heart, entre otros y cuentan con Graham Whitford, hijo de Brad, el guitarrista de Aerosmith. Hacen blues rock, el cual no está mal.
El show estaba por comenzar. Una animación en pantalla muestra un asteroide en el espacio que se dirige a la Tierra y choca, momento en el que un juego de luces, humo y fuego simulan la explosión en tarima dando pie para que Angus Young aparezca al frente tocando Rock Or Bust, canción promocional del álbum. Se dejó escuchar la voz de Axl, ¡Wao! Dudas disipadas.
Tocaron luego Shoot to Thrill y con un «Manchester, not a bad place to be» por parte de Axl siguieron con Hell Ain’t a Bad Place to Be. Seguido sonrió amablemente a unos fans que coreaba su nombre y empezó Back in Black con el público entregado aplaudiendo y cantando.
El show continuó con otra pieza del último disco, Got Some Rock & Roll Thunder y uno de los clásicos de la era Scott, Dirty Deeds Done Dirt Cheap. Definitivamente la voz de Axl estaba a la altura del compromiso y siguieron con Rock ‘n’ Roll Damnation.
La batería de Chris Slade -quien recientemente había vuelto a la banda- arrancaba la poderosa Thunderstruck, seguida por High Voltage y Rock ‘n’ Roll Train.
Una campana apareció en el techo de la tarima, era la hora de Hells Bells, otra de las favoritas. Angus Young empezó a tocar ese famoso riff de apertura. El guitarrista y símbolo de la banda es una fuerza de la naturaleza, aún patea toda la tarima con su ropa de escolar australiano y sus 60 años a cuestas. Muchas veces es más el show que lo que toca, pero ¿Qué más se puede pedir?
Del mismo Back In Black siguieron con Givin’ (*) The Dog A Bone. Axl, aún con un soporte en la pierna por la fractura que tuvo en el pie, no tuvo reparos en moverse por todo el escenario, como estamos acostumbrados a verlo. Le preguntó al público si quería sangre: seguía el turno de If You Want Blood (You’ve Got It).
La presentación, de una dos horas en total, ya había alcanzado la mitad. Tocaron Sin City, You Shook Me All Night Long -canción muy coreada por el público-, Shot Down In Flames y Have a Drink on Me. Todos los discos desde el T.N.T. hasta el For Those About to Rock (We Salute You) tuvieron presencia en el setlist, a partir de entonces sonaron sólo canciones del The Razors Edge, Black Ice y Rock or Bust.
Hace rato que ya había caído la noche sobre Manchester. El público hizo su parte con la siguiente canción, T.N.T. Por cierto, una de las pocas ocasiones en las que Axl no lució tan bien. Siguieron con Whole Lotta Rosie, en la que el público siguió aportando. Para esta canción apareció una muñeca inflable gigante en la tarima. Cerraron con Let There Be Rock y Angus Young interpretando su solo de guitarra.
La puesta en escena la completaron Stevie Young, sobrino del hoy ya fallecido Malcolm Young y el bajista Cliff Williams, retirado de la banda para cuando finalizó esta gira. Williams indicó en aquel momento que AC/DC era «un animal cambiado» en alusión a los múltiples cambios en la alineación sufridos en el tiempo.
El encore arrancaría sonando Highway To Hell con Angus Young emergiendo entre fuego en el medio de la tarima. Axl había aprovechado para un cambio de vestuario y el público aún tenía energías para cantar el coro a todo pulmón.
Luego tocaron Riff Raff y la noche cerró con el himno dedicado a los fans For Those About to Rock (We Salute You) al grito de Fire! se escucharon explosiones en todo el escenario. Así terminó uno de los shows de rock más populares que se puede ver.
Por mi parte me habría gustado escuchar Who Made Who, mi canción favorita de AC/DC, pero sabía que era difícil ya que casi no la tocan. De resto, un nuevo hito logrado en mi andar por festivales y conciertos de rock.
Aquí les dejo el setlist completo y una grabación de aficionado bastante decente de este show.
Escrito por FUShoots. Edición de texto por Lastmario.
(*)Givin’ the Dog a Bone is a song by AC/DC appearing as the fourth track on their 1980 successful album, Back in Black. On original versions of the LP, the song was incorrectly spelled on the album sleeve as «Given the Dog a Bone», but was correctly spelled on the vinyl. The song is about oral sex.
Una respuesta a “Crónica AC/DC Manchester 2016”
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