Asistimos por primera vez al festival más importante de rock y metal de Bélgica, el Graspop Metal Meeting, celebrado del 20 al 23 de junio de 2024. Aquí les dejamos nuestra experiencia.
Además aprovechamos nuestra visita para conocer sitios cercanos de interés, incluyendo un salto a Países Bajos. Aquí pueden leer sobre lo que vimos.
Planificando el Graspop 2024.
Tenemos basta experiencia en festivales de este tipo, pues ya hemos ido a unos cuantos Hellfest en Francia y Download en UK y España.
Este año queríamos experimentar algo novedoso, así que le pusimos el ojo al Graspop Metal Meeting en la región belga de Flandes, más específicamente en la población de Dessel.
Al ser un destino nuevo nuestra planificación incluyó una investigación más detallada, a sabiendas de que estos festivales son una maravillosa experiencia pero requieren cierto esfuerzo físico que, con el paso de los años, cada vez pesa más. Aunado a esto, ya no existe el fervor por ver cada banda que se presenta, y nos volvemos más exclusivos racionando fuerzas y tímpanos.
Compramos las entradas el mismo día que se inició la venta, a finales del año pasado. Después fuimos por los boletos de avión con destino a Bruselas, la ciudad más grande próxima a Dessel.
Buscamos alojamiento cerca del lugar y conseguimos una casa para tres en un camping en los alrededores de Lille (no confundir con la ciudad francesa del mismo nombre) a un precio y distancia razonables.
Procedimos a alquilar un auto para desplazarnos la media hora por trayecto que íbamos a hacer cada día de festival.
Lamentablemente el día anterior a la salida uno de nosotros tuvo que cancelar el viaje por una emergencia familiar (afortunadamente todo salió bien).
Para completar los inconvenientes, en los terrenos del festival había estado lloviendo y el pronóstico era, al menos para los primeros días, que seguiría la lluvia. La decisión de la organización fue cerrar los parkings y sugerir llegar en tren al pueblo más cercano con estación (Mol), usar bicicleta, taxi, shuttle, etc.
Con este panorama llegamos a Bélgica.
Escenarios del Graspop 2024.
El festival tiene un escenario principal (Main Stage) con dos tarimas (Norte y Sur), en donde toca una banda mientras se va preparando la siguiente.
Hay un par de carpas independientes una de la otra (Metal Dome y Marquee). Nos llamó la atención que el sonido está hecho para que salga hacia afuera en una de ellas, así los que no pudieron entrar también pueden disfrutar algo del show.
También hay una tarima pequeña (Jupiler) que se alterna con la carpa Metal Dome. En esa misma zona estaba el café rock, espacio para presentaciones de bandas tributo y en el que se podía ver el fútbol de la Eurocopa 2024.
Día 1. Stake, Asinhell, Kerry King y Megadeth en Graspop 2024.
Volamos el mismo jueves de festival bien temprano en la mañana y al llegar buscamos el auto y nos pusimos en rumbo a Lille. Nos permitieron hacer early check in en el camping, allí dejamos nuestras cosas y nos fuimos al festival.
Haciendo caso omiso a las advertencias fuimos directo a Dessel y nos encontramos con que algunos de los parkings sí estaban abiertos, así que pudimos dejar el auto muy cerca. Un alivio.
Íbamos equipados con toda clase de protección para la lluvia: poncho, cobertores impermeables para los zapatos que no sirvieron, chaqueta para el frío, etc.
Entramos rápidamente y dimos una vuelta por el escampado para detallarlo y hacer las siempre odiosas comparaciones con Hellfest. Graspop tiene bastante más tiempo realizándose, pero también es más pequeño y no ha crecido tanto como su hermano francés, así que aquí no había nada que nos fuera a intimidar.
Pasamos por los escenarios en los que tocaban simultáneamente los ingleses de Bleed From Within y los suecos de Amaranthe, sin hacerles mucho caso.
A quienes sí les pusimos atención fue a los neozelandeses de Alien Weaponry, famosos por hacer thrash cantado en maorí. Les vimos un rato en Metal Dome.
Nos fuimos a los escenarios principales para ver a los belgas de Stake. Nos gustó lo que vimos y escuchamos, excelente presentación que disfrutamos por completo; para nosotros fue lo mejor del día y la revelación del festival.
De aquí nos dirigimos a Marquee a ver a Asinhell, el side project del guitarrista danés Michael Poulsen de Volbeat. Excelente presentación, muy buen death metal.
Seguimos hacia Metal Dome para ver el final de la presentación de Health.
De allí caminamos al Main Stage en donde la alemana Doro terminaba su show y se venía el exguitarrista de Slayer Kerry King (ke rryking para los amigos).
Vimos este espectáculo por completo y disfrutamos de su estilo totalmente Slayer, incluyendo en su setlist versiones de Repentless, Disciple, Raining Blood y Black Magic.
La banda la completan el baterista Paul Bostaph (también exSlayer), el bajista Kyle Sanders (exHellyeah), el guitarrista Phil Demmel (ex Machine Head) y la poderosa voz de Mark Osegueda (Death Angel). Todo un supergrupo del thrash.
En la tarima de al lado arrancó de inmediato Baby Metal, la banda japonesa de metal en la que cantan tres niñas; bueno, ya no tan niñas. Impresionante la cantidad de gente que mueven. Las vimos un rato, por curiosidad, y nos fuimos.
Llegamos al final de los noruegos de Kvelertak en Marquee y regresamos al escenario principal. Como pueden apreciar, no tuvimos problemas para cumplir nuestra cuota de pasos por día.
Megadeth empezaba a tocar. Las presentaciones de la banda tienen años siendo impecables a nivel musical, sólo quedando abiertas las incógnitas para la voz de Mustaine.
En esta ocasión arrancó bastante bien, solamente tuvo problemas con algunas de las canciones más complejas vocalmente, aunque esto poco importa: siempre disfrutamos de esta banda y sus maravillosos setlists.
Vimos por primera vez al guitarrista finlandés Teemu Mäntysaari, sustituto del brasileño Kiko Loureiro a quien ya habíamos visto en Hellfest 2022.
All Them Witches fue nuestro próximo objetivo; les vimos un rato y descansamos los oídos pues en Jupiler se venía un clásico del metal pesado.
Los brasileños Max & Igor Cavalera andan de gira tocando algo de cada álbum de Sepultura. Con un “The Real Sepultura” saludó Max al relativamente poco público presente. Algunos traumas infantiles no se superan, y este es uno de esos. Tuvimos suficiente con un par de canciones.
Pasamos de lejos por el escenario principal mientras se presentaba Tool. Escuchamos unos minutos y nos fuimos, estábamos cansados y a ninguno de los dos nos emociona demasiado esta banda.
Día 2. Dying Fetus, Fu Manchu, Turnstile y Judas Priest en Graspop 2024.
El césped dio paso al barro producto de la pertinaz lluvia del día anterior y el efecto amasador de miles de pasos de los festivaleros. Nos esperaba un largo día.
Esta vez sí cerraron los parkings cercanos (por acumulación de barro) y nos tocó dejar el auto al borde de una vía. Afortunadamente conseguimos un sitio relativamente cercano al festival, así que no tuvimos que caminar más que el día anterior.
El dispositivo para evitar el barro en nuestros zapatos no funcionó, así que nos tocó pasar el día con los pies húmedos. Son gajes del oficio.
Llegamos para escuchar el cierre de P.O.D. con el himno Alive sonando en el escenario principal. Nos quedamos por allí para ver un rato de la presentación de los suecos de HammerFall. No estuvo nada mal.
Nos fuimos a Marquee para ver un buen rato de los veteranos del death metal Dying Fetus. No nos convenció el sonido.
Cambiamos de carpa para ver algo de High On Fire, saliendo de allí por lo saturado del sonido, y nos movimos a la tarima Jupiler para ver de qué iba Deez Nuts: no nos gustaron mucho los australianos.
Vinos algo de los alemanes de Kadavar y decidimos quedarnos en Metal Dome para ver la presentación de Fu Manchu.
Tuvimos una experiencia completa, ya que pudimos ver a los músicos de esta banda californiana probando ellos mismos el sonido antes de tocar.
Estuvo brutal este show, lo disfrutamos de principio a fin en muy buena posición. Lo mejor del día con diferencia.
Nos desplazamos al Main Stage tratando de sortear los charcos de fango más profundos y llegamos para ver el final de Turnstile. Estaban empezando el solo de batería del setlist y nos pareció muy bueno lo que vimos.
Nos mantuvimos allí para ver el principio de Judas Priest sin mayor expectativa y resultó que lo vimos completo. Rob Halford estuvo espléndido, su voz le acompañó toda la noche y el setlist estuvo inmejorable para una auténtica fiesta.
Cerramos un segundo día en alto después de no haberla pasado muy bien que digamos.
Día 3. Pestilence, Batushka, Mr. Bungle, I am Morbid y Wolfmother.
Volvimos a estacionar en el mismo sitio. Había unos chicos que trabajaban en el festival señalando los puestos. Charlando con ellos nos dijeron que el día anterior se habían quedado atascados unos cuantos autos en los parkings. Les gustó mi chiste con el juego de palabras grasspoop.
Afortunadamente se acabó la lluvia y el cielo comenzó a despejarse. El barro ya casi no tenía charcos, así que el desplazamiento dentro del festival sería más cómodo.
Empezamos nuestro día en Marquee con la banda de death metal neerlandesa Pestilence. Vimos el show completo sin convencernos el sonido y nos quedamos allí para lo siguiente.
Se presentaban los polacos de Batushka. Queríamos ver su curiosa puesta en escena y escucharles un rato. Nos pareció que su música se vuelve repetitiva, así que nos fuimos.
Dimos unas vueltas por esa zona y vimos el inicio de Glenn Hughes tocando Deep Purple en Jupiler. El bajista inglés mantiene una excelente voz.
Nos fuimos al escenario principal para ver Mr. Bungle, la banda de Mike Patton. Mucho talento junto en una banda, allí le acompañan viejos conocidos como Scott Ian y Dave Lombardo. Incluso invitaron a Wolfgang Van Halen, presente en el festival, para tocar una canción.
Eso sí, el show es poco menos que una locura de canciones thrashers mezcladas con versiones de baladas lentas, algo así como el extravagante peinado de Patton (o su retorcida mente).
Volvimos a la zona de Jupiler en donde terminaba de tocar Uriah Heep. Nuestro plan era entrar a Metal Dome para ver a Brutus pero fue imposible. La popular banda belga jugaba en casa y la organización, inexplicablemente, les metió en un espacio relativamente pequeño colapsando todo aquello.
A esto sumen la gente que andaba cerca tratando de ver el partido de Bélgica en la Euro 2024 en el café rock que está justo al lado y donde todos los días sintonizaban un partido del torneo. Nada mala la idea. En ese lugar también se podía hacer algo parecido a karaoke cuando se presentaban las bandas tributo.
Tras este sinsabor nos acercamos a Marquee a ver cómo preparaban todo para una de las presentaciones más esperadas por nosotros, I’m Morbid.
El bajista Dave Vincent y el baterista Pete Sandoval, ambos fuera desde hace años de Morbid Angel, andan girando con canciones de la banda, sobre todo de los álbumes Maze of Torment y Covenant.
Aquello fue un espectáculo de lo mejor del death metal de la Florida. Mención aparte al ingeniero de sonido de la banda, quien supo mezclar a la perfección estos complicados sonidos en vivo, algo que extrañamos en otras presentaciones.
Quedamos asombrados por el despliegue impecable de los músicos y tristemente sorprendidos por la poca gente que asistió. Esto fue lo mejor del día, y tal vez del festival.
Al salir notamos que Limp Bizkit estaba tocando en el Main Stage. Escuchamos unos minutos desde lejos y decidimos no acercarnos. Nos movimos a Metal Dome para ver a los australianos de Wolfmother. Presenciamos este espectáculo un buen rato y nos fuimos.
Nos alejábamos con la música de Avenged Sevenfold primero y después del noruego Abbath de fondo y nos fuimos antes de la medianoche, nos esperaba un partido de fútbol de la Copa América. Fin de día.
Día 4. Ereb Altor, Body Count, The Black Dahlia Murther, Scorpions y Machine Head.
Se presagiaba un espléndido sol para este día, así que tuvimos un festival que empezó con lluvia, pasó por fango y terminó soleado. Vaya experiencia.
El último día se nos presentó como el más flojo del festival. Incluso llegamos a pensar en no ir, pero la posibilidad de llevarnos alguna sorpresa nos motivó.
Llegamos para ver un poco del viking metal de la banda sueca Ereb Altor. De aquí nos fuimos al escenario principal a ver el inicio de Body Count de Ice T.
Nos dirigimos a Jupiler para ver un rato de Of Mice & Men. Era evidente en los asistentes la alegría por poder disfrutar del sol en la gris Bélgica, mientras que en nosotros sólo se notaba cansancio.
The Black Dahlia Murder, con nuevo vocalista, empezaba su presentación en Marquee.
Antes de que terminara nos fuimos a Metal Dome para ver a los australianos de Karnivool y no nos gustó para nada el show.
Nos asomamos al escenario principal para el inicio de Deep Purple y a duras penas aguantamos la primera canción del setlist, Highway Star: la voz de Ian Gillan no daba para más esta noche.
Regresamos al escenario Jupiler y allí vimos brevemente a los rusos de Slaughter to Prevail. Por cierto, les recomendamos que vean su presentación en Hellfest de 2024 y aprecien la locura que desató en aquel público.
Decidimos irnos a ver el fútbol, pues hoy pasaban en el café el Alemania – Suiza. Vimos el primer tiempo y nos largamos.
Hablando de alemanes, en el escenario principal estaban arrancando los de Scorpions. Empezamos diciendo que los veríamos un rato y decidimos quedarnos hasta el final. Excelentes e impecables como la última vez que les vimos en Hellfest 2022.
Tememos que Klaus Meine esté en sus últimos días cómo frontman. La voz estuvo muy bien, pero su movilidad es ya bastante limitada. Sin embargo, esto fue lo mejor del día y con diferencia. Scorpions junto a Judas Priest es sin duda de lo mejor que queda del rock clásico y heavy metal en vivo.
Estando allí decidimos aguantar una canción más e irnos.
Venía Machine Head, quienes abren sus conciertos con la poderosa Imperium. Estuvo brutal, incluyendo fuegos artificiales, llamas y vociferación de Robb Flynn. Cierre con broche de oro a nuestro parecer. Machine Head siguió, nosotros no.
Regresamos al auto por última vez en esta edición del Graspop.
Instalaciones, restauración y merch en el Graspop 2024.
No queríamos terminar esta crónica sin hablarles un poco de las facilidades que ofreció este festival en su edición 2024.
Restauración.
Nos llamó la atención la gran cantidad de puestos de venta de alimentos y bebidas. Los precios de las comidas no eran los mejores, pero no estaban mal y siempre había una alternativa económica, como las famosas papas fritas belgas o las salchichas a un token (equivalente a 3,50 euros).
Sobre la variedad, había un poco de todo, pero no comimos nada que nos pareciera memorable.
Las bebidas estaban a muy buen precio para ser un festival. La cerveza pequeña y los refrescos también costaban un token.
Instalaciones sanitarias.
Había baños portátiles en varios sectores del festival, cabinas para orinar y unos pocos urinarios en lugares alejados de los demás baños.
Se formaban filas para los portátiles, pero fluían rápido. Los baños para orinar eran un poco caóticos para entrar y salir.
En resumen, no estuvo mal este asunto, pero como siempre, se puede mejorar. Nos habría gustado ver más urinarios distribuidos por el recinto, por ejemplo.
Merch.
Ofrecían la oportunidad de adquirir el merch del festival en la web y recogerlo in situ. Sin embargo, las colas para comprar allí no eran particularmente largas y no nos enteramos de que se hubiera agotado algo.
El merch de las bandas lo tienen centralizado junto al del festival, algo que nos parece práctico.
Comentarios finales Graspop 2024.
La experiencia, comparada con Hellfest, es bastante más cómoda y el nivel de barro en el peor momento es un chiste comparado con Download UK.
El sonido no siempre fue el mejor y el público en líneas generales se comportó bastante bien. Sólo el domingo se vio uno que otro sujeto que parecía no tener modales para un festival de este tipo.
¿Volveremos? Quién sabe…
Escrito por FUShoots y editado por LastMario.
Otros Festival de Metal a los que hemos asistido.
Hellfest 2022 Parte 2 con Scorpions, NIN, Guns N’Roses y Metallica.
Una respuesta a “Crónica de Graspop 2024.”